o TRAGEDIA, e EL PHILOCTETES AD DE SOPHOCLES.
. EN DOS ACTOS. -
Ñ, 23,
ACTORES. piioctétes , hijo de Peante. “ 7 Niréo , de el sequito de Ulisses. dy > de Itaca. ; Y <Hertules» ds E -Piólemo ; 0 Pirrbo, hijo de Achiles.Je Coro de los que siguen 4 Neoptoles “9, compañero de Neoptólemo. mo»
ooo rior
Scena se supone en Lemnos, cerca de una cueva poco distante de el mars
ACTO, PRIMERO.
y esto ha de ser, si ha de triunfar la Grecia. == Yo no puedo (lo sabes ) presentarme
á ese infeliz : el mira su miseria como nacida ya de mi consejo. Si, yo me engaño ) 0 Philoctétes piensa 1 que es Ulisses autor de su abandono. de la RENA el e El me busca y me encuentra en cada Quedó (son cp ERAN En ado) fiera, E O “enfermo, Feha pe dto. ):Philoctétes. quese le pone 'á tiró, y el dirige se sintió herido AE SOlO 3 pues apenas á ui tiempo á mi.su enojo, á ella sus po Ohtiuatrayes flechas.
SCENA T..
Ulisses, Neoptólemo , Eglsto;
Us; Nil s Á pisamos, Neoptolemo , la
Que el dolor le arrancaba con violencia epa el sosiego al sacrificio, ms. E Orden á la armada entera. pe > IMPOrta poco, y yá lo sabes ¿Y4 es tiempo de obrar con diligencia, “la do venir á Troya Philoctótes e eta toya Philoctetes su buena gracia, 0 bien POr fuerza sto nos encargó toda la armada, :
Mas tú bien púedes sin algun recelo resentarte á'sus ojos. Vé , las señas ' que ya te dí conducirán tus pasos; unas mala abertura de una peña, no bien cerrada al viento y a lás lluvias, con una fuente al lado , y una selva que entristece á lo lejos... mas ¡qué mi- ro! E be Á ya
e
E! Prñociétes
ay ya descubro la fuente. Esa es la cuevas, adelantate Pyrrho , y reconoce «si está o no Philoctétes”
Necp. Voi... no, en ella
»€l10 se vé; pero en un tosco vaso,”
¿y en un lienzo pendiente de una cuerda
que destila su sangre, y'en el hnmo que viste las paredes, y en la hierta que le sirve de lecho estoi “mirando su vida , su dolor , y su miseria.
-Uliss. Esta es su habitacion , no hai' que
dudarlo, >»
y él en busca andará de algunas, hierbas :
para curar su herida. Oyeme un poco, logremos los instantes y su ausencias. O Neoptólemo , hoi tienes en tu mao el exito feliz de nuestra empresa,
si los consejos que te dí practicas escrupulosamente.
Neop. Me aconsejas,
en suma , que le diga.l.
-Uliss. Oye un momento,
todo lo diré en breve: con paciencia “sufre aqui , que yo apunte lo que oíste largamente en el mar. Di con fran- -Queza o a sd
- | tu nombre á Philoctétes y tu. patria;
y añade , que navegas á la Grecia
abandonando á Troya y á la armada,
que injusta á tus derechos te desprecia.
Dile la muerte de tu padre Achiles,
_el llanto de los Griegos , tu presteza
en navegar á Troya, y la injusticia
con que “Los Gefes (como si ellas fiveran armas de los Atridas) destinaron
. Jas armas de tu pulie (o, ¡si el lo vie-
. ra!)
al engañoso.». sis dí, e eso,
alengañoso Ulisses, que en tu herencia
contra toda razon entró, y dejaron
“, al hijo solo , triste , y con afrentá.
- Luego despidete ¿ COMO que quieres los instantes ganar para tu buelta: deseale la paz que aqui no, tiene,
y que vea á su patria antes que muera,
y vé marchando. O En hijo de Achiles,
dirá, ¿con que te vas y aqui me. dejas?
gu E «
Ha! no..Por tu gran padre, por
Dioses, + “y por tu patria ázia la qual naveg que me lleyes contigo , que me, sa de esta infelicidad enque me eucuent eS de dirá. Tu condesciende,, ouducelo á la playa con sus. flech! PE en nuestra nave; y ¡0 felic nosotros! y ¡0 felíz la Grecia entel Pero antes (me olvidaba) antes prod * que el su aljava te dejé : tu —pretexiá y que quieres venerar; aquellas armas. que Hércules consagró, que quit verlas, Que quisieras tocarlas qee vez, y un instante no mas. Si el te las de no lo dudes, harémos que nos sigh y que llegue á la armada auque” quiera, Basta. Lo ¡sabes 3 Jupiter, Jos pel la victoria, el despojo nos decret pero viniendo á Troya Philoctétes! que traspase al vil Páris.con sus fie0” Y esto es lo que llamabas negro eng! indigno de tu sangre. La experiend te hará ver otra cosa antes demul Un ardid inocente que nos lleva á tocarla victoria , por diez años buscada y fugitiva y que remedia / los largos males de un enfermo ilus y le hacen ver el fin de su miseríól ¿podrá llamarse Negro engaño? ¡ yente oo q tu repugnancia si triunfar descase y á Atrevete una vez», y un poco tic á fingir algun tanto. Despues yen el candór á tu pecho para siempró J y siempre la verdad habie en tu Jer», Neop. Pero al fin is e on E rut ra - Ageno de ra20n. Uliss. Viya y dispierta la tiene, si otro alguno». £0p. Pues dejemos. Y 545 trazas ahora. Yo quisiera MOvVerlo con razones , y 10 dudo Un lS podré conseguirlo,
1S SuEna vano intentas
' Convencerlo 4 razon : es inflexible
[RO menos que tu padre, y á la Grecia
' de quien se cree mal abandonado
mira, como mira 4 su miseria,
/ leno de horror. Ei fin esto es dificil,
Ja Y Gun es mas el vencerlo á viva fuerza.
InoP. ¿Tanta tiene un herido?
155, Tiene tanta
y Veneno y la muerte inevitable. '>
"0p. Pero Troya bien puede dar en tiérra A
Ñ al golpe de mi espada : lo decias,
mo yo mal name engaño." %
Ss. Si, mas era
Ñ decirte , que ni tu sin Philoctétes
UL Él puede sin Neoptólemo vencerla.
“op. En fin pues yó lo dije , yó lo haré:
A de los Dioses mi ficcion aprueban, 05 me enseñarán ese camino
A yó nunca he pisado.
0 0S+ Pues espera
e Riloctétes tú, yó me retiro, :
E 8 me descubra. ¡O! tu Minerva,
' a sedores quieres á los Griegos,
Que Pirrho un instante fingir sepa.
is
SCENA Il.
PS
, » 3 Neoptólemo » y Egísto. Sh pe donde Philoctétes desgraciado ea petarda ¿si havrá avistado ¿Ma nave en el puerto? ¡O! si él la pora, NN Veo Pezando y cayendo acá viniera. 100 O esos montes andará cazando, 5 Es Jargas desgracias lamentando. Oy a Su Ocupacion , llorar , sufrir, Eso. Men Lemnos sin poder salir. te 99 POr cierto que tan dura suer-
)
b Y V e
Ses ma ¡ar Sa amarga que la misma muerte. Que 2 duda es bien ciega la fortuna; Su descarga sin reserva 'alguna de valor e rribles golpes. Un guerrero 8 0] * conocido , COMpañero Elande Alcides , hijo de Peante
y De Sophocles.
| Que le basta 4 que vibre en cada flecha -
| € se vé mal reducido en un instante A á tan funesta y congojosa vida, que fuera gran castigo á un homicidas. El da á las fieras cón el dia espanto, y ellas á él con la noche: nunca el llanto en sus Ojos se cnjuga , siempre gime, siempre á su alma, á su pie el dolor oprime. E Neop. ¡Infelices que somos los mortales! “expuesta nuestra vida á tantos males carece de un asilo ;. no , 10 se halla cómo evitarlos , si acOmetene». Egis. Calla. : Dioses, ¿es €l? ¿me engaño? yó lo véo, o lo pinta á mis ojos el deseo.
Neop. El es, uo hai que dudar, ya nos
ha visto. : ¿Pero que podré yó decirle, Egisto?
ACTO II.
Neoptólemo , y: Philoctétes. '
. EY > . SETA: ad Phil. ¡O! mi huesped, ¿que Dioses, o qué vientos : tan enemigos tuyos, tan violentos á esta playa infelíz te han arrojado? ¿llegas naufrago , O llegas extraviado?
pero tu trage te me pinta Griego. ¡Dioses! ¿será verdad? dime te ruego ante otras cosas tu nacion, tu nombre: dilo , y consuela con tu voz á un hom- bre, que - apartado de el mundo, y medio muerto - de sus miserias , puebla este desierto. Suelta la voz , y diga ella á mi oido, lo que á mis ojos dice tu vestido, Eres... Neop. Si , Griego soi, tu lo dijiste. Phil. ¡O dulcisima voz, que á mi alma triste. ; ; ha dado finalmente aquel consuelo, que tantos años me ha negado el Cie- lo! ¡ha! que todos los Dioses , hijo mio, largo tiempo'conserven ese brio '
Az de
A ; El Philoctétes E 7 de tu brillante juventud , que veas con ellós le amistad ¿ y yá mucióN largo tiempo á:tu patria, y que no seas, Yo infeliz soi'aquel fatal sucre] qual yó el: mas infeliz de los mortales, de: las armas de Alcides heredero, que tengas mi inocencia, y no mis ma- Philoctétes; , á quien los. dos Atri 1
les. -* Oprimido con dos cruéles heridas Dime tu nombre , y como acá A buiste, una en el alma, otra en el: pie dej y y la ciudad de Grecia en que naciste. dormido en esta cueva ¡y .se am IVeop. A Sciro que es mi reyno, y pñtcia taron. q mia Pensamiento de Ulises. ¡Ha! -jengal 0; -yó Neoptólemo el tumbo dirigia; enciigo cruel de mi reposo! > de y si el viento igualára á mi impaciencia >si, tuya “fue la trama: es fiel' testif -yóÓ ya estuviera allá , no en tu presen- ; cia:
Saca. de el pecho un pliego doblado! pero una triste calma... más verisimilmente mn perg caminol Phil: ¡Ha! no. Ella ha sido : queda con el enla manos. . 1 - - alegre para mí,pues ha trahido - ALT de tal Principe á mis ojos. Pero Scyro:: este papel, que; E de venir conmif Pero ese aire , ese rostro::: A lo que quaudo mi alma dejando á estos* miro, siertos k tu eres hijo de Achiles. ¿Que me dices?. vaya tristeá juntarse con los muerl Neop. Si, mi padre es Achiles. Lo verá Minos, lo verá Pluton, E Phil. ¡O! felices / y siendo ellos tan rectos, como % el padre , el hijo, el heroe sin segundo, leerán ¡enel á un tiempo mi paciení cuyo heroico valór ádmira el muudo; mi rectitud ) tu empeño, y tu sentenó tu viva imagen de su edad primera, ¡Ha! gemirás alli, pues aquí engaña serás como él, pues eres como el era. dará tu falso pecho en tus entrañas” Neop. Quieranlo asi los Dioses: se conm- verdadero alimento, “tento como otro Promethéo á “ á la calma no culpo. ya), ni 5d viento, hambriento. pues aqui, y en tus labios entretanto Neop.. Pero tu llevas áctu indignació) ¿encuentro á Achiíles á quien amo tanto. . más allá de lo justo. La pasion Mas segun hablas ,tu lo conociste: te ciega O Philoctétes. ¿fue en Troya? ¿pero- quando alli estu- Pril. Si 9 vier as viste?
un buy”
yo ahora vengo de el sitio , Y... no me engaño, -
yó en Asia no te he visto : me es es- traño
tu semblante , tu trage,
no encuentro griego en ti, sino el len- guage. :
qual es tu nombre?
Phil. ¡Dioses! tu has salido
de “Troya, ¿y ni mi nombre alli has oído?
Cielo , tierra, lo veis , y sois testigos), aun mi nOMbrE olvidaron mis amigos. Yá no hai Theséos, ui Hercules; vivió
o,
mi llo: ¡Ha! escucha,y dpi sel dime A
si otro con mas razon se 7 y 1 me. | Quando los Griegos , si es _ que no l sabes, y navegaban á Troya: con mil naves Ñ yó con ellos seguia á la yictoria). 1,1 Y sediento de gloria, cal Y vano con las flechas , que envidit" en mis manos la Grecia, yó mira 1 Crecer ya al Simoénte, y luego ax pa sangre Troyana , y con el va ! A] Y
xXx
"de las viudas de Phrygia , y era Hec- tor O
Muerto á-mis manos ya vivo dolor de Andromache su esposa, y Troya . Ardia; ; . E
| Petro todo en mi loca fantasia.
.
Ñ ¡Deseos fatuos! ¡pensamientos vanos! de que tal vez se rien los Troyanos. Ya fin un dia entre estos pensamientos "hos faltaron los vientos
ál avistar á Lemnos: Fatigados “ela calma los Gefes , los soldados - Saltaron en la playa, y yó imprudente Corriendo á mi ruina , juntamente, Son ellos, pise alegre estas arenas. Aqui mientras con: otros conversando - Me alejo de la playa , y voi miraudo -SStos tristes collados , mal pisada Wa pequeña sierpe , preparada: - POr la ira de los Dioses inmortales - Para origen funesto de mis males,
Me picó en este pie. Yo no creiera . WE ina sierpe pudiera,
“unque toda ella fuese ira y veneno, ¡ Causar tanto dolor. Qual roto el freno, SM ver camino 0 senda , vá furioso
Mstigado de el latigo un brioso
Cavallo ; hecho una furia, si ; marche,
levando por los montes en mi pie XOdo un infierno. Tres veces en vano
lie corterme el pie, tres fue mi ma- : LAO » . say
A
Sia mada por fuerza. Yo gemía E q Cesar, sim remedio; y ya venia * noche á los vivientes intimando E iaso y paz. Yo triste suspirando EN aba solo ; quando fatigado £8£mir tanto, á un sueño no espera- | o OS en fin mis ojos. Pero 2qui o wi huesped. : MMS 30 ¿z de io det | Sin ley jarme en medio de tus males, arme hasta el fin? de sue son tales, a lado e tienen. Dejame te pido Wei quel sueño , menos mal dormido, 0 dispierto despues. ¡O! que yó ahora
Mm ho
“De Sopbocles. 3
creo mirar la dolorosa aurora que abrió entonces mis ojos. Dia triste tú lamentarme , tú empezar me viste un llanto, que no acaba. Ha ya diez años, : pr ó mi huesped , que lloro los engaños
. de aquella negra noche. Yo dormia
y entre tanto la armada dirigía
su rumbo á Troya. Ha! piensa qual quede“ ; A
quando dispierto al rededor miré,
“y á la armada en el mar lejos de mí,
y ú mi lado este pliego solo ví..
«Pero á donde llegaron mis enojos :
quando por el turbado yó mis ojos pasé consansia , y ví que me decias Lo despliega, y lee. (oytlo) Philcctétes, vendrá el día, y soto te hallarás sabre esa arena. Sufrelo y amigo 3 fupiter lo ordena por boca de Calchante: tus clamores sonta causa ; tu herida , y tus furores turban e impiden nuestros sacrificios. Ha! que los altos Dioses mas propicios te asistan. Vive en paz, y que te vea luego , y con sano pie, como desea tu amigo Ulisses. ¡Perfido! zel amigo? ¿el mio? ¿á quien dejó solo, y mendigo? o! ¡tuviera el la paz, que me dejó! o! gimiera el diez años como yo, con mi herida, mis ansias, y mi penas y diciendole yo : Jové lo ordena.
«Estos tristes collados , que me oyerón,
movidos de mis ayes respondieron con eco lamentable : y ya llorando
pasado havia dos auroras , quando
viendome á esta miseria reducido,
ws
levanteme de el suelo , y aunque heri- ”
do, ; y muy falto de sangre , y mas de aliens to, empece 4 ir mendigando' mi sustento, Las flechas demi aljava iban certeras en busca de las ayes y las ficras, que si heridas huían, mas que mis pies, mis manos las se- guian, Eta puesqual sierpe con ellas me arrastrab,, A pas
"
E y para coger las presas de mi aljava. > «El mar airado , y un furioso viento,
y un naufragio hacen todo 1mi cónten- -
to, S ; ñ 3 arrojandome aquí de tanto en tanto infelices , que no enjugan mi llanto; pues luego marchan, y nie dejan triste:
llegaron á mi patria en busca mia
Phenix, y Ulises, ambos diputados
por-la armada, y diciendo que los hados
muerto Achiles ponian e1 mis manos,
=y en mi espada el vencer á los Proya- nos.
Ellos dijeron; yo los escuché,
los creí, me.embarcaron; y llegue
á las playas de Phrygia felizmente.
Salto en tierra, me aplaude nuestra , gente, A AE
sorren todos al puerto,
juran que ven á Achúles, que no ha IAUET$O) / |
- El Philoctétes
que vive en mí. Yo- yano y orgulloso 1O bien su tumba visité , y reposo
, Para sncalma pedí, álos dos hermanos - me "e Ñ É 3 presento y que: pongan: en: ns
. MAnOs quanto. mi padre poseyós, les digo.
Si, SE aged todo es tuyo amigos.
y las costas de la Asia abandone,
de buelta á Sciro ; pero en el camino la calma ha mejorado mi destino
disponiendo , que en Lemnos conociese al grande FPhiloctétes, y que Oyése >
yo delos tuyos, tú en fin de mis la-
bios, tu lamentable suerte”, y mis agraviogo O! que los Dioses tengan por amigos á quantos se declaren enemigos de los impios Atridas: y que pueda vengarme yo algun dia. No me queda
mas que decirte ya. Yo te deseo
todo el bien que no tienes. A Dios. Veo ; gue
y asihe vivido , hasta que aqui venistes A excepcion de sus armas , que ya/son 2 «+ ó.mi huesped, enfermo consumido. de el'sabio Ulises. 3 Y. con qué fazon? de tristeza, sin trato, y sin vestido. 3y quien las pudo dará Otro guerreros “Neop. Por cierto esa tu historia, que 10s .- y quitarlas al'unico heredero? dices : CP dije indignado. ¡O! joven, respondió es dolorosa , y si los infelices Ulises , que presente alli se halló, quando se hallan con otros,que lo son, tu aun uo has sudado sobre,las arenas sienten algun alivio, con razon 'de esta playa fatal , que ves ¿apenas té puedes consolar, mientras me.miras llegasá Troya, y quieres ya igualarte | pues no menos que, tú, siento mis iras con los Gefes, que. vió el sangriento. | . contra ese Ulises, y los dos hermanos), Marte, eS que á los Griegos en vez de los Tro- militando diez años? no, 'jamás | yanos ! de en Scyró tú colgadas' mirarás | +, maltratan sin cesar. No bien faltó mi : las armas de tu padre, que los.Griegos | e PAU qua: á.mi'merito dieron y y á mis ruegos. ' Pbil. ¡O Dios! *3que dices? ¿ya murió el Yo entonces. SiS DR | invencible Achiles? Phil. Dime (y sufreme , hijo mio, |. VWeop. Si, él ha muerto. E si te interrumpo ) ¿pero Ayáz tu tio, | Phil. ¡Ha! dejame lorarlo. El fue por y €l valiente Patroclo , que dijeron? cierto: : e Ed NVeop. ¡O si vivieran ellos! | - digno de larga vida ,él lo es de el Phil. ¡Yá murieron! Manto : y vive Ulises! j de toda Grecia. Neap. Yo (porque ¿que havia : IVeop. Pero tú que tanto ; en Troya que espesar? 0 ¿quien vivia, tienes porque llorar tu triste suerte, que pudiera véngarme? ) detestaudo | llora amigo tu vida, y no su muerte. los dos hijos de Atreo ,: amenazando | Apenas el faltó, como decia, al eugañoso Ulises me embarqué, Ml
0 De Sophocles. a
.
1
que sopla , aunque muy poco, un sua sepulcro en que diez años he vividos ve viento. : : PE Ma. Egis, ¡Ha! que te den los Diosesjun con» SGENA VL tento ¡ ] mayor aun que tu llanto. Choro.
Phil. ¡0 Dios! ¿qué miro? -Olmi amable Neoptólemo, ¿tú áScyro Mavegas, y me-dejas en mis penas?: ¿Y tendrás corazon? ¿y estas arenas - Verán , que me'abandonas? ¿y podria de Ulyses imitar la villania el hijo de un Achíles? Por tu padre cuya mémoria vive por sw madre Diosa inmortal, y por tu misnto honor, Que á comipasion te mueva. mi dolor. 1811 veo, que he de serte muy molesto, Pero echame, hijo mio, en qualquier _ puesto % €n la proa, en la popa, en donde quier ras: ? capot | llevame á Scyro:, quitame á las fieras de esta Isla inhabitable. ¿Qué me dices? ¿Serán siempre mis dias infelices? ¿callas? ¿Y á tantos ruegos no con-
sientest - IS ¡Ha! mi vida, y mi muerte están pen” dientes + de tus labios. EA
Egis.. O Principe y no creo Que puedas resistirte , no..Yo veo la amable compasión en-tu semblante. Philoctétes ¡Verá luego á Peánte 50 anciano padre. Si, lo están diciendo us Í : 1 xa e , tu piedad >» Y yo lo entiendo. Po Bien va, si asi lo quieres, vente amigo : : _4 Mi patria conmigo, yÓ si tarde algun tanto , si callaba, solamente dudaba, que asi herido pudieses tolerár 2 embarcacion, y la inquietud de el
mar. | Phi. ¿Y como-s1 podre? yo aquí tolero una vida insufrible, yó aqui muero _€n esta triste gruta. ¡Hal permitidme : lé diga un largo 4 Dios; O bien segnid- me, y Miradla una vez , pues ella ha sido
Í
Una voz. Bajo el enorme peso , qué le oprime : de altisimas montañas , yace, y gime Typhéeo sin cesar. Despedazado 'de la rueda fatal, y abandonado al tormento ,al despecho, á la aflica ciO1, LES : con, $u sangre mezclando está Íxióm el llanto amargo de sus tristes OJOS. Choro. Estos dos los enojos de el Cielo provocaron, y al Tonante irritaron: sacrilegos , violentos OR hoi gimen con razon en S4s tormentos» Voz 1. ¡Ha! que yó veo en Léemnos entren tanto Ñ 2 la herida , soledad , dolor, y llante . de Philoctétes ; pero en el no veo la barbara insolencia de Typhéo, “da impiedad de lxion. ' Choro. Por tanto advierte “que el Cielo va mudaudo ya su suertes “Bien lejos de contarlo entre los muúer= tos, , : : AGA vemos que abandonando estos desiertos vavega alegre á Scyro. : Voz 1. Es asi la verdad. Yo ya lo miro en su patria estrechando entre sus bra= A O E : ':4 su padre, á quien dá tiernos abrazos; el oye, y este cuenta asi abrazados. sus dolores y afanes ya pasados: y véal contarlos convertido en gus- tos: lo que al sufrirlos fue tormento” y susto. eS Asi alegre; asi contento cántando yá el nayegante, quando sosegado el viento muda todo de semblante, calla cl mar , el firmamento se descubre más brillante; ( 24 2
*
A
(o
ps
Y «y segura — azia la orilla se apresura — la barquilla cruzando sin miedo el nar. = Despues en ls playa-cuenta ya sin susto el marinero, que en medio de la tormenta | «' iba buscando-un mádero. temiendose naufragar. es e JOR C ACTO + II, SCENA LI.
”* ; > ES
«Philoctétes , Neoptóleno, y Egisto
Phil. Vamos, vamos Neoptólemo, á la nave. Veop. ¿Y que haremos alli? Phil. ¿Que? Esperaremos ' que el viento tome fuerzas: finalmente alli yó me veré fiera de Lemnos:
JEgís. Pero ¡que miro! Vienen á nosotros
dos hombres, y yá llegan : Serán ellos.. Vendrán sin dudan. -
SCENA HL. duos mismos, y Niréo con un Marinero.
NVir. Yo vengo de Troya,
- y aqui he saltado por faltarme el viento. '
Los Dioses 03 prosperen. Quien con- migo Lt - 4 tu presencia llega, ilustre Griego, me dijo que aqui estabas , y no quise pasar sin «saludarte. Yo navego — ' ázia Creta mi patria, en donde cargo ropas, Hechas , y varios instrumentos son que se armanlas machinas murales, y á la Asia voy frequentemente, y vengo. ; «desde que empezó el sitio : soy Niréo, he conocido á Achíles tu gran padre, y de tí se habla mucho-en el Asedio. No se qué se pretende, solo “pude ver, que Phenix con pocos compañe- ros ;
Se embarcó con el fin de ir á buscarte:
EL Pbilociótos
“Neop. Yá está visto, los dos hijo Atréeo 30M 4 Phenix han movido. Pues Ulise Siu duda irá con el, 2 Wir. No. Yo me acuerdo; 0' que Ulises equipaba otto mayio “parairtambien en busca de otro Grl! Weop.- ¿Sabes quién sea? 5 Wir, Si lo se. Mas dime, 1 ¿quien €s ese varon? 9 Neop. El heredero : de las armas de Alcides... Phil. Philoctétes. O Vir. ¡Philoctétes dijiste! ¡Hal má INC ao de huye lejos de aquí ,que el nuevo é no te amanezca eu la desierta Lem Phil. Hombre ¿qué dices? Habla sin a E y aclara tus palabras. - NVeop. Yo aborrezco: "+ de . y este tambien detesta á los Atrid -y ellos no están aqui. Puedes sin mi - decirnos quanto sabes. co 10 Wir. Philoctétes; 3 --«Ulyses va en.tu busca, y con inttf de conducirte á Troya, ó por eng! O por fuerza : te esperan ya los Grid! el les ha prometido en su partido] volver contigo á Phrygia , y yo luego. Phil. Vaya: con que los Griegos dl mente e! de mi se acuerdan : ¡y olvidaron ca. que un dia abandonaron á este mi” á quien buscan ahora! A Egis. ¿Qué sabemos? e os Dioses, que protegen la ¡noc les havrán infundido este deseo, $ para que una vez salya Philoctéto4 de las miserias , que padece en Len Acaso en Troya curarás tu her Y quando alli no encuentres el rem” sentirás ciertamente algun alivio yá con.el trato de tus compañeros Y yá teniendo parte en las patalla%, que á tus flechas darán mas dign9
pleo, a pi ;
» -
(o | De Sopbocles.
So Pl it
a y pe, Agradece 4 Neoptólemo á quien si- los sentimientos de mi ayrade pecho, li gues, > : cupo > el apartára á Ulyses de esta empresas > ASLyó “te sufro en paz» -- —Philoctétes , y el hijo de Laercio Ir. Hay mas en esto. entonces se unirán , quando se junte
Tiene Priamo un hijo, 4 quien los la noche con el Sol. Disto yó menos E Dioses pida de unirme con. la sierpe, que introdujo istinguen sobre quantos agoreros por mi pie mi dolor, y su veneno. y - Se'conocen en Phuygia: El adivina” Vamos , vamos de aqui :'si llega Ulys- Y siempre son sus vaticinios Ciertos. ses. A Salió incauto una noche de su Troya que como- yó se encuentre €n un des Y did luego en las manos de los 1ues- sierto labs |
tros. : Pongamos de por medio á todo el mar, Lo he visto muchas veces , y él es uno Nunca se dista. mucho de un perverso. de los muchos Troyanos prisioneros. Neop. Pero el viento es muy poco favo- Éste, pues, dijo oyendolo los Gefes: -—rable, PR - En vano continuais en el Asedio: “y muy tenue: el irá tomando cuerpos Troya no cederá, sino á las flechas -? esperémos un poco. Que entregó Alcides al fatal Guerrero, Phil. Noy que Ulysses
-- quien diez:años hace abandonasteis: ciertamente no espera.
Wi él curará jamas , sino viniendo Neop. Pero el viento |
á buscar la salud en estas playas: tambien es tenne para Ulysses.
E Al punto Ulyses Heno de ardimiento Ph:1l. Saben “Se ofreció á conducirte.. Yo lo he visto * los pyratas marchar con. qualquier £quipar con presteza en el Sigéo - tiempo.
¿a naye, y partir: algunas horas . Neop. Pues tanto lo deseas , vamos. To-
L OSpues que el zarpé yó tambien de el "M2. Ss
2 Puerto, j - 2 tus alhajas, y huyamos.
Mi ya le ví. Su nave es mas velera, Phil. ¡Yo! no tengo
Y Cstraño: haver tocado yó primero > alhajas que tomar : algunas hierbas
€n esta Isla , que Ulyses. Dios Os guar- con que curo mi herida , algunos lien-
de. e : ZOS
Nada mas tengo que decir , y el viento con que la limpio, son todos los bienes
Me lama 4 el mar. A Dios, vivid feli- - que me dejaron al partir los Griegos-
Ñ PA o 38 Este arco, y esta aljava con sus fechas
| Esio ¡Ab! To verás tu patria. que Hercules me dejó, que yó venera 55 A Dios , Niréo. son mi cierto thesoro.
0 me . Neop. ¿Este es el arco,
SCENA IL y estas las flechas de aquel Diost ¿Y ePhilocr : ; puedo E
- "HOCtétes , INeoptólemo, y Episto tomar yó , Philoctétes , en mis malos Phi, UE ; ES e: ns banas que Alcides Otro TIEMPO ¡Dioses! Sufris con vida al impio tuvo en las 3uyas?
y io Phil. Puedes hijo mio,
1 sobre ser fingido , ¡2un es tan ne- puedes , y tomalas. Yó ya te Gebo O : esta dulce esperanza con que vivo Me se ofrece 4 obligarme con razones, de vér autes de mucho por tu medio
| AS la fuerza! ¡Ab! Si ese agorero á mi padre, á mi patria , á mis amigos»
se en Troya lo vé todo , viese aqui Tu me das hoi la vida, y el consuele
qu e
rr
.
4o
des” Daselas.
tomar mis armas. Pero entre los Grie- gos
sabe que eres tu solo, el que ha tenido. la gloria... de tocarlas. Neop. Yo agradezCO».. "¡pero tú vas mudando de semblante! Egis. ¡Qué palidez! ¡Qué sudor frio! ciet- to en él hai grande. noyedad: da blanco se le paran los ojos :'sobre el pecho la cabeza inclinada mauifiesta” , su_ desmayo , y lo dice su silencio» Phil. ¡Ay de mi! Neop. ¿Philoctétes , di qué tienes? Pbil, ¿Qué tengo? Nada. Vamos de aqué luego. Neop. Vamos , silo permite tu desmayo: Phil. ¡Ay! No yo no deErad Caminé- mos. he ¡Dioses! ¡Benignos Dioses! Neop. ¿Porqué g gimés? ¿Por Ps fijas s los ojos en el Cielo? Pb:l. ¡Ay! Gimo- SS estoi en estas playas, y miro al Cielo; y entre tanto ruego á Jove, y á los Dioses inmortales, que nos couduzcan al deseado puerto. - ¡Ay! ¡Ay de mil Neop. Lo dicen tus gemidos: y disimulas en vano: yo lo veo en tu frente, en tus ojos; tu padeces un intenso dolor. Phil. Yo lo confiesO... no puedo sufrir mas. ¡Ay! La congoja».. de el morir... 10 es mayor... Hijo... YO Mue£rO... E yo en breve. perderc... todO.. el sentido, «».
+ de y tu entonces. s.
Egis. ¿Qué dice? Phil. Ah Yo te ruego... por la gloria de Achiles... que: tu en- tonces... no te apartes de aqui.. Neop- Deja ese miedo, No te abandonare : 10
soy yo Ulyses.
Egis. Pero esas iras
El Philoctétes
que. yo ya no esperaba. Si, bien pue- Phil, Pero s... mis Armas ... ¡ay!,
Dleop. Yo te prometo, | que mientras estén cllas en mis mi NO pasárán sino á las tuyas.
Phil. Esto... Neoptolemo».. es MOrir»..
-Egis, Cierto, el espira.
Neop. No. Será algun desmayo pss ocasionado de el dolor.
Egis. ¿Quién sabe?
IVeop. ¡Infeliz! Aqui está su pobre le recostemoslo en él.
Egis. Bien dices.
-M
NVeop. ¿Puede : encontrarse un mendigo: sá quien “Cielo, 2 tráte*con mas rigor? ¿Y á quien) hombres |
|
olviden mas, y orion metas) Egis. No, no hai hombre - tan barbil en el mundo, by E que si lo viese como aqui 19 vemos no diera algun suspiro á los dolorá que asi lo martirizan. Neéop. Yo confieso que con razon detesta á los Atridas,
á Ulysstes , y á la armada. ¿Qué? empiezo
tambien con el á detestarlos. Bgis. ¡Pyrrho! ¿Que me dices? ¿Qué escucho? Neop. Que habla en ellos ' la maldad , el engaño : que los sis - quien los quiera a que al £m8 miento ? los que son como yd nunca se abate!
y que mi padre me dejó heredero / de su heroyco valor. .
son aqui intempestivas. ¡Ha! Pensen! en navegar a Troya, Philoctétes “Y privado de sentido:en breve tiempi puede ser conducido á nuestra navé. sin que se nos, resista , y sin sabel Ulyses, como viste, e sabio Ulisses que acaba de embiarnos á Niréo disimulado én mercader, mos insta - á apresurar la marcha. Vamos luegó: ; los
pS De Sopb 03 Atridas esperare a PP ¿Quel z iS Que:d Troya “on Philoctétes., que a. vencer mar- chemos. | top. Pero engañando á este infelíz vi Mente, z y gngañandole yó! 3y ha de ser esto ¡POrque Ulysses nos insta? ¿porque es- d Béban ol, oe Miestra buelta los dos hijos de Atréo? y) Mi Egisto ,tú lo es, y no puedes fualnente olvidarlo. Fueron ellos de que á:mi padre Achiles tantas veces ttaron en Asia, los que hicieron | Escer con. engaño á Palamédes, 3 peo Palamédes : ellos Y ona á Ayáz mi grande tio | AN pasarse con gu mismo azero Bandole las armas de mi padre, Para darlas á Ulysses: y el consejo | S €ste admirable artifice de engaños “ne aqui triste, solo, y medio muerto Jual tus ojos lo vená Philoctétes. o Egisto > yd fingir no quiero, o lo mande Agamenmon, Ulysses, : Eis, E , €l mundo. PAN y es abandonemos, rOya para siempre. Ello prometen des 105es su ruina al heredero sa aljaya fatal. : Pero los Dioses e mandan fingir: ellos son rectos, ltmpre aborrecieron al engaño, que Pros ogan siempre. Yo aqui espero, “E Ao cistea. cobre sus sentidos. ¿NO o voi, y lo que el Cieio » Navega od , $1 CONMIZO bi, PA a Phrygia. ¡Amable luz! Yo buelvs á gozarte, y tú á mis ojos. “4 se recobra! : AN Dia 0 aqui no encuentro... 2 osest ¿Mi huesped donde está? . ¡Ah Perdona :
dE
1 sao
los
IS cl
Ue d
sx
€ $ cueva , y vé A Neoptólemo»
cles. 3 7 A4 mis dudas, hijo mio. Con que en Lem: nos 7 Pd ES has querido espérarte, y á mi lado, y aguantando mis males! No lo hicieron «os Atridas asi. : Vah! No es:lo mismo descender de un Achiles, que de Átreo», Vamos , vamos Neoptólemo. Neop. ¿Y adonde? Phil. ¿Adonde? A Scyro. Neop. Pero yo no puedo navegar do Mi patria. Phil. ¿Qué accidente 5 te lo impide? ¿Qué dices? Neop. Que yo siento, Philoctétes , tu engaño. Phil. ¡Engaño! ¡O dioses! ¿A mi me engañan? ¿Como? ¿Y quien? ¿Fan presto ; * se han mudado las cosas? Me prometes conducirme á tu patria: yo contento me dispongo á marchar; un importuno y penoso desmayo , quales suelo á tiempos padecer, cierra mis Ojos, sita la advertencia: no bien buelvo /
0
»
me ql
CiAy triste!) á usar de mi razon» Y: sescuecho, * - ,
y me lo es yn misterió
a tú, que nuúestro- viaje ázia Scyro : que me énga- ñan: quel soil un miserable. : Neop. Compadezco, Philoctétes, tu suerte. Sal amigos ' sal ya de confsion. Yo no navego. “como dije , á mi patria, voy á Troya, y. tú conmigo has de venir : el Cielo dará' alii la victoria á tus saetas, y remedio 4 tu herida: Phil. ¿Hablas tú serio? Neop. Tanto , que hablan los Dioses por mi boca; son ellos... Phil. ¡Ay demi! ¿Joven guerrero; ué lazo mo has armado? ¿Y te parece que un desdichado como yo , que €n Lemmos : vive á merced de el frio, y de las fieras, 10 es bastante infeliz , si desde lejos mo vienen á insultarlo? Dame al punto, E dar
“dame mi arce, y mis flechas, Neop, Desde-luego
son tiyas, si me sigues. Phil. ¡Ah! ¡Qué escucho!
El Philoctétes
Ulys. Alli tus males. 00 (lo prometen los Dioses inmort cesarán, y con ellos tus gemido! Egis. Esto es cierto. |
¿Qué negro engaño es este? Ahora en- Ulys. Lo grita á los oídos
tiendo
tu cobarde artificio. ¿Y tú te llamas
hijo de Achíles? Llamate primero
O Sinón , o Thersites. Los cobardes
no son hijos de Achíles. 'WVeop. ¡Ah! Yo encuentro en tus labios la pena de mi culpa: - COn. razon me desprecias. : Pbli. Y yd espero har
que me buelvas mis armas , y perdono
tu cugaño , y vete en paz: en mi de-
sierto dejame perecer. ] IVeop. ¿Y que haré yo? SCENA. IV.
Los mismos , y Ulises con Niréo.
Ulys. ¿Y pudis te dudar? ¿Esto os mandó
la armada entera? Phil. ¡O Dios! ¿Quien ha trahido
- á mis ojos tal furia? Estoy perdido.
Este es Ulyses. - Ulys. Si; yó soi. Phil. Tu embiaste
tus engaños primero , y ya llegaste:
ellos son los cobardes precursores, "que suelen preceder á los traidores.
Ulys. Eso mientras á Troya caminamos me lo dirás de espacio-: ahora vambs.
Phil. Perfido, tú lo esperas? -
Ulys. ¿Pues que? ¿Te hallas mas bien en-
tre las fieras gimiendo sin cesar sobre esta arena solo , y enfermo? | Phil. “fupiter lo ordena por boca de Calchante, Diys. Pero ahora por la de Héleuo Jupiter mejora “tu Suerte, y
ya te mira mas propicio.
Phil. Mis ayes turbarán el sacrificio de
la armada devota.
Héleno de la Grecia : en el Sigéo mil veces se lo oí. Phil. Yo no te creo. Ulys. Si, Jupiter lo dice. - Phil. ¿Y hasta quando _Ssufriró yO á un perverso,-que abust de el nombre de los Dioses Impian cubre con ellos quanto finge, y mil Si en esta Isla fatal me abandont Jupiter lo ordeno : si me dejaste 1 - gemir diez años sin algun consuel esto mandaba puntualmente el Cif y si ahora me insultas, y me eng! Jove, los Dioses dictan tus maral* Teme , malvado , teme en cada inst que te falte el terreno, 0 que el TO! este : 4 te fulmine en un rayo su furor, y sus ultrages vengue , y mi dol0 ¡Sierpe sombria! ¡Y cómo te ocultó de mi que te conozco! Tu esperab que un joven , á quien antes engañl me engañase despues : tu violenta? «Su bello natural, y un corazon, ; que no, no se hizo para la ficcioMÍ 1 Sufre , y manifiesta el sentimi0l de haverte obedecido. Yo presiel, triste joven, tu enmienda. Ha! se 10 te 1] si al grande Achíles, como en el * blante, 3] eres en la alma: rompe y echa ¿Y
toda ficcion > buelveme mi arco: 3 Ulis. Espera, 0
Deteniendo 4 Neptolémo, que vane le su arco. , »
Pbil, ¿Pero
Ulys, + que ha de esperar?
er si resuelyes
nn DOSOtros venir á Troya. 24. ¿Y buelyas
á : tratar de Cste asunto
De Saphocles.
Jye pues: ya: resuelvo. Marcha al Punto, a fuye de mi presencia ahora mismo, ete h Troya, 0 mas bien vete al abis- mo. ! | Yo puedo , ni quiero , ni jamás Podré , 9 querré vivir contigo. . Más: aa Que perezcan los dos hijos de Átreo* Ou Su armada: Este es todo mi deseo, Que tambien lo será, quando ande
Aun
Suelto
Mi espirita de el cuerpo. Esto he re- , Suelto.
e esto mismo las furias resolvieran,
2 As furias en Lenmnos estuvieran.
Ñ Ch yá, buelve á tu cueva 3 para na-
te. S X :
Tenecesita el Cielo, ni la aroiada. We , y muere sin gloria , por mi pue-
0; TVexcro , Phenix, Neoptólemo » Dio- Medes ; : : da Ma con tu aljava 5 y si ellos 10, sa 35 podrán sy sabré yo htraspas; as dirigir al cuemigoy
1 o , Y vencer: será testigo. Vas Ue pcia de mi victoria; > eel Y 5585 tendrá toda la gloria, Mee Cielo «destinaba ”
de ostra , á tus manos, y á tu
va.
May, = A -¿E8 . AS , y tira consigo a Neop- > 11, : y o y ba de cruel! Buelve , quitame la vida, - Que a eres ladron , pasa á homicida;
Y E primero , y luego mata,
A el barbaro pirata.
: viles Feules, y tú en manos tan
Us ar
Mas mirars
O e mirarás , y las de Ahciles! Kijo dh 13 si eres ya, como dijiste,
Qua En padre tal , ¿porque mentiste udo : : ,
Que 50] me prometias, tan; O de tus manos ú las mias Weo, on mis flechas?
P+ No he faltado
" £n Esto mi Sto mi palabra, Aunno han pasado
á manos de otro alguno.
Ulys. sobre furioso es importuno..
Vamos, vamos Neoptólemo: perdemos todo el tiempo en hablar, y nada ha- COmos.
Da dos pasos más con Necpiólemo Phil. Perfidos, acabed lo que empezasteis; antes me-abandorastels, : me desarmais ahora : teneis hecho:
lo mas, y os falta poco: abridme el pecho si ya no descais, que con un lento. martirio me devóre mi tormento. , Playa ardiente de Lenmnos , selva triste, .. que cansada de oÍírsie , me bolviste
amis ayes com tus ecos repetidos, E sufreme en paz , yO buelvo á mis gemi- 0.05»
Y $ cueva llena ya de mi dolor, que'mil veces beviste mi sudor, mezclado com mis lagrimas , recibe á tu-huesped antiguo : «hora vive, mas luego , segun crece mi anargura, morirá, y tu serás su sepultura. Venid fieras, venid , despedazadme, yenid > y devoradme: : las Hechas que ya hicieron vuestro €s- panto » están en otras manos: y mi llanto en mis ojos continuo , ni áldas fieras, ni á Ulysses mueve. ¿Pero tú qué espe- pis hs : infeliz Philoctétes?- ¿Qué amargura te queda que apurar? Tu desventura llegó á lo sumo. Sal, sal de tus penas- Hartas ya de mi llanto estas arenas beban mi sángre » y pasen mis dolores - 4 la armada, y á todos los traidores, que á este golpe me obligats cop. Tente amigo: 'deja la espada , Pyrro está contigo» y te buelve tus armas Phil. He, tu vienes 4 engañarme otra veze Neop: Aqui las tienes; to malas mo te engaño. Ulys. ¡O Dios! ¿Qué has hecho? Neop» Arrancar deesa mano, y de ese peche 1,44
Se las dá»
a
MA El Pbiloctétes.
y '
una muerte violenta, que sobre ser mi afrenta juntamente sería dolor de muestra armada , y alegria de la enemiga Troya. > Ulis. ¡Ha! De otro modo... Neop. Yo no se otro mejor, que darlo todo á la honradez , y nada á la ficcion. «Ulys. Pero... ES Phil. Pero tu vé, y dile 4 Pluton, que esta flecha dio fin á tus engaños, á tus palabras, y á tus negros años. Neop. Philoctétes , ¡ha! No. :
4 _
Poniendose entro Pbhiloctétes, y Ulysses. Piensa ul momentO....
Phil. Pensaremos despues.
Neop. El fingimiento no es peor , que la -venganza.
Phil. Yo lo creo, , pero ahora... '
Neop. Tu empiezas á ser reo,
y á merecer tu cueva, y tus dolores.
Pbil. Nunca faltó defensa á los traidores.
“Deja de apuntar.
Bien va. Viva ese indigno , tú lo dices, Viva, y llene á la tierra de infelices, hasta que en fin las furias de el Averno den un dia con él en el Infierno. - NNeop. He , templa amigo, templa tus enojos : * y empieza yáá mirar con otros ojos, y á escuchar con una alma mias serena á quantos á la parte de tu pena compasivos entramos. Pu afliccion te pone tan distante de razon . ' quanto estás de los hombres. No es E Calchante, no Agamemnón y nO Ulyssés , el To- nante eN por Héleno Troyano es quien hablo; y eres tú Philoctétes , y soy yo á quienes llama , y deja vinculada la victoria á tus flechas, y á mi espada.
» ahora
En Asia la salud te está esperando y la fortuna, el honor, O Dios! ¿Y ql do | 04 te dejarás vencer? Conoce amigo, que eres tú solo el unico enemigos! que tiene Philoctétes. !Hal sí amé á Achiles ya inmortal ,si no olvió% con su muerte su amor, piensa y un hijo suyo tu asistencia implora+ Llevame á las batallas : un guerref! diestro ex el arco, diestro en el a qual eres tú, me eu señará á vence! Tu me verás seguirte , tú crecer | imitando tus brios, tú serás, A Philoctétes , mi Achiles , y verás... Phil. Yo ya he visto bastante. YO' nada de quanto tú imaginas, ¿Nuestra al da: A puede crecer, si se le añade un mue! Este soi yo,hijo mio, Y ten por cit! que la edad , y el deseo de la glo! te engañan dulcemente. A la victo se lega tarde , ó nunca. Los Troy? tienen espada , corazon , y manos | y nuestra sangre agotan. Tu 10? tante 8 marcha , milita , y vénce si el Tod, te quiere prosperar. Mas yo, hijo Y yo no soi lo que fuí: falta ya el * a mis debiles brazos , y mi acer0 | se embota... ¡Ha! Yo no soi qui primero. -2Veop. Si lo serás, curando alli tu 1o7 Ulys. Lo prometen los Dioses. A Egis. Tu partida 3 lenará de contento A muestra gen” Nir, Vamos. ¿Qué esperas? bi Todos. Vamos. Phil. ¡O inocente, o candido Neoptolemo! Yo veo tu bello corazon, y tu deseo; Pero tu ciertamente no conoces el engaño que ocultan esas voce% Ulys. Como Estaba se estás 0 Neop, No, 10 hai engaño. A Phil: Tu lo crees “asi , yo no lo ey
Tu corazon es recto, y tu razon kl Mide A los otros por_ tu corazon, ¡Pero quanto te engañas! Si temieras, Como. las temo yo , si conocieras, Como yo las conozco, las dobleces de tu infiel a O quantas ve- PUES: te Ivieras apartado con horror e £u infiel; y torcido conductor!
que ellos son funestamente sabios: abre la dulzura, y luego el llanto €) y sigue la muerte. bea es el canto S na fatal Syrena , y lisongeras ps el mar con la calma por afuera
su seno mortal cria, y fomenta
Sl terror del piloto , y la toFmexta.
A suma, yo no creo lo que el dice;
Mas quiero «vivir aqui infelice, ES dichoso con el. Si quiere el Cielo o Pa darme en fin algun consu elo,, -“OMducirmerá Troya. , el me hablará
- ertamenté por boca , que tendrá: > Uy a en su lengua.
> Que el Troyano y ni es Ulysses, ni es mi her-
los
éleno
> Mano, Po, Mi ¿ANUZO.
4 ca Ulisses es sincero: : a 4 Jove, A Apolo, á ese Agore- Mba, al Olympo en cada instañtez MRéleno, ni Apolo , ni el Ponante, o ¿elo , ni el Abismo Ur, Ñ al boca hablarán. Ph: diempre es el mismo. MUA pops lo seré Pe loses!
Jue siento!
hi
NO; SCENA Y,
Hercules y los mismos. tro, Oye ¿Jo $01 Alcídes : no temais. Atento ICY e hyloctétes. Tu bien sabes
ya O y Ves, $ viste alguna vez ) quan gra-
¿AM i *
y
De Sopbocles.
eme sctéme Neoptólemo , á sus labios.
43 y quan prolijos mis trabajos fueron; pero pasaron ya, y ellos me dieron
asiento entre los Dioses inmortales. Tanto es es el bien , que pueden dar
los moles. Tu verás , que por Lemnos (vendrá el dia) por la montnoca Lemnos se subia. rectamente á la gloria. Ahora el Cielo quiere que dejes este triste suelo, y navegues á la Asia: alli hallarás el fin de tus dolores , Curarás alli tu herido pie. Luego ya sano : con una flecha mia , y por tu mano ts Paris espirar : la “guerra ' endrá entonces su fin. Darán.en tierra, debilitadas por él torpe amor aun,mas que por los golpes de el va- lor, las murallas de Troya. Y tu , bañada. con la sangre de Achiles no vengada, Neoptolemo , que á-Phrygia viste, ¡ha! luego
/ ¡con el acero armado, y con el fitego, corre á vengarla. Si, marchad los dos, la fatiga os espera: ee Dios, que os habla por mis labios ,“el To-
nante
- «sos destina á4 vencer. Tened delánte
su bondad , su justicia , y sus enojos:
pensad que desde el Cielo ven sus ojos
el vicio, y la virtud en vuestro semo;
y que al malo va el mal > y el bien al
- bueno.
A. Dios. Yo osamo : haced que siem- fe os ame.
Phil. ¡Alcídes , ha! Permite que te llame, que te vea tu antiguo compañero, antes que á Lemnos deje.
Neop. Yo venero s rande Hércules tu voz , y ya la sigos
hiloctétes.. :
PriliYa Vol iria
Neop- Lo ves amigo,
el Cielo se declara. a
Ulys. El peroró
felizmente mi causa, *
Phil. Y aqui yo
6 — E El Philoctétes .
3 miro la ultima vez estos desiertos, ¡Ha! Marchad , ¡ha! Corred grandes pl 00 que viví contado entre los muertos, mas 7 A ' lejos de los vivientes. - - al combate, al sudor, y á las palo di A Dios pequeñas fuentes, Una voz Tiembla d Troya infeliz. VO] á quienes mi gran llanto , y su amar- dejando : y : gura 0 Príamo tu solio , y Suspirando | ,, - Quito mucha dulzura, baja al polvo, y espira. En fin T1ol 1 y aumento las corrientes. A Dios pra- nO3S., ' dl d «dos z Sóltad las armas, y ocupád las man de mis largos gemidos ya cansados. en abriros sepulcro. Estos horrortá
| Fieras vivid seguras, y yo 10 Os perseguiré. Tristes alturas _de estos asperos montes , no pisadas
O Paris , hijos son de tus amores. , Ancianos , mozos , virgenes , é infal ¡ha! si llorais á vuestros muertos , 16%
: de otro alguno , tened siempre graya- vais á ser todos victimas de el fut) =p despues.no habrá quien llore: ¿hal P! «mis huellas, y creced. A Dios ,me au- - rad antes. CN A Yá truena, ya fulmina triste cueva de ti , me llama el viento. sobre Troya la guerra: Lemnos á Dios... ya se abrasa, y da en tierra: Neop. Amigo , ya tardamos. ya no se vé. Camina Ulys. Dióses de el mar favorecednos. pisandola el pastor, Todos. Vamos. j y el labrador - la hiere con su arado, . | | É : Asi un Imperio Muere, 08 SCENA VI que ya irrito al Tonante; e. y queda en un instante Choro. sepultado, : - 8 iS : Si damos á solo el choro las «MW Tod. Al combate, al sudor, d guerreros,” - Scenas de los actos , podemos MN encended vuestras iras y enojos, en esto a Mp, Rácinas ne ad prevenid los sangrientos aceros, practica varias Uttar cn y esperad los gloriosos despojos. yen su Esther, 138 SS TON 3 Y ' a 5 ,
+ Barcelona: Por la Viuda Piferrer > Vendesé en su Libredó administrada por Juan Sellent; y. en'Madrid'en 5 bae Quiroga. 9